Stephen Hawking cree que Rajoy podría estar curvando el espacio tiempo.
El científico aconseja hacer acopio de conservas y gasoil
El popular físico y cosmólogo británico acaba de alertar a toda la comunidad científica internacional con sus últimas afirmaciones acerca de la posibilidad de que el espacio tiempo podría estar curvándose a causa de la peculiar actividad política de Mariano Rajoy, el presidente del Gobierno español. El problema, según el científico, no es la curvatura espacio temporal en sí, sino la poca precisión del fenómeno, debido a que Rajoy, así como ninguno de sus colaboradores, está teniendo en cuenta el tensor de curvatura de Ricci, y los tremendos desajustes que la omisión de este parámetro pudiera causar en numerosos países del entorno.
“De hecho”, afirma Hawking, “el espacio tiempo ya ha empezado a curvarse en varias zonas del país”, sobre todo en la Comunidad Valenciana, y añade que algunas singularidades de 1954 y 1961 ya han sido vistas en varias ciudades por diferentes personas y en distintos días. En el centro de Alicante, informa el equipo de Hawking, se han detectado media docena de nóminas equivalentes a once mil pesetas mensuales, estofados de carne elaborados con chistes y canciones populares en lugar de carne, automóviles funcionando con aceite de girasol refrito cinco veces, o gallinas ponedoras viajando en autobús, en brazos de sus dueños, con pasmosa naturalidad.
En Madrid, el propio ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, fue visto propinando un piropo de 1972, bastante soez, a una joven universitaria, que se vió obligada a lanzarle una llave inglesa “por si acaso”, dice la chica. Poco después, el ministro declaró en la COPE que el uso de polainas será obligatorio para todos los colegiales a partir de los siete años, y se rezará “largo y tendido” tanto al comienzo como al final de cada clase.
Stephen Hawking cree que si Rajoy continúa curvando el espacio tiempo a esa velocidad, más de siete millones de españoles podrían verse afectados por alguno de los axiomas de la geometría euclídea, y dedicarse entonces al estraperlo.
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